Núria Casarramona
Según la OMS (Organización Mundial de la Salud), la depresión afecta a más de 300 millones de personas en el mundo, siendo la principal causa de discapacidad y que contribuye de forma muy importante a la carga mundial general de morbilidad. Se calcula que en España aproximadamente 2’4 millones de personas sufren de este trastorno, siendo el cuarto país de la Unión Europea con más casos, precedida por Alemania, Italia y Francia. Además, la depresión afecta más a las mujeres que a los hombres, según datos de la Encuesta Nacional de Salud, de 2017.
Existen tratamientos psicológicos y psiquiátricos eficaces para combatir este trastorno del ánimo, como la activación conductual, la terapia cognitiva conductual y la psicoterapia interpersonal, o medicamentos antidepresivos; estos últimos con numerosos efectos adversos. Pero parece que un nuevo camino hacia la atenuación de la depresión se ha abierto con la patente de una bacteria intestinal (Christensenella minuta) con aplicaciones terapéuticas para tratar los trastornos del estado de ánimo que han descubierto investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
Imagen de la bacteria Christensenella minuta. Fuente: https://nutraceuticalbusinessreview.com/news/article_page/Christensenella_The_cornerstone_of_the_gut_microbiota/144751
La investigación la ha llevado a cabo el equipo de la investigadora Yolanda Sanz, del Instituto de Agroquímica y Tecnología de los Alimentos (IATA-CSIC), a partir del estudio de la comunicación demostrada que hay entre los intestinos y el cerebro. Como Sanz señala, “La microbiota intestinal podría ejercer una función importante en trastornos que afectan al cerebro como las enfermedades neurodegenerativas y psiquiátricas, así como alteraciones del estado de ánimo.” Estos avances ofrecen nuevos y prometedores enfoques terapéuticos para fomentar la salud mental, y se han centrado en bacterias de la familia Christensenellaceae, que hasta ahora se estaban usando para tratar enfermedades crónicas comola obesidad.
El equipo de Yolanda Sanz ha pactado un acuerdo con LNC Therapeutics para continuar el avance en la investigación, fabricación y comercialización en todo el mundo de la terapia desarrollada para el tratamiento de trastornos como la depresión y la ansiedad. Esta alianza, afirma Sanz, permitirá avanzar más rápidamente en el descubrimiento de los mecanismos que posee la bacteria y que tienen un efecto antidepresivo y ansiolítico.
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